El plan de recuperación para el automóvil del Gobierno no ayuda a CIE y Gestamp en Bolsa

El anunciado PERTE del automóvil por el Gobierno no tendrá impacto en las cotizaciones de CIE Automotive y Gestamp, las únicas empresas de este sector en la Bolsa española. Sin embargo, ambos valores intentan poner en precio los cambios en el sector y las mejores previsiones en una recuperación marcada por la crisis de los semiconductores.

El Proyecto Estratégico para la Recuperación y Transformación Económica (PERTE) anunciado por el Gobierno incluye una inversión de 24.000 millones de ayudas para los coches eléctricos, cifra que incluye 4.300 millones públicas y 19.700 millones de inversión privada para el periodo comprendido entre este año y 2025.

“A falta de conocer más detalles de implementación, el hecho de que se apueste por el sector, tras varios años en los que se ha perseguido la producción de vehículos diésel parece ser algo positivo para la automoción”, explica Iñigo Isardo, analista de Link Securities.

Pese a que la noticia sea positiva para el conjunto del sector, algunos analistas señalan que no tendrá impacto directo en la cotización de CIE Automotive y Gestamp, las únicas compañías relacionadas con esta industria que cotizan en la Bolsa española, mucho menos a corto y medio plazo.

Por un lado, Álvaro Aristegui, analista de Renta 4, explica que ambas compañías están “muy diversificadas geográficamente”, suponiendo en entre un 10% y un 15% de los ingresos; por el otro, Darío García, analista de XTB, resalta que “las decisiones de este sector provienen directamente de las marcas que requieren de los servicios de estas dos cotizadas”.

Aún así, hay visos de esperanza para ambos valores a medida que el sector está dando un giro de 180 grados, pasando de motores de explosión a vehículos 100% eléctricos y enchufables. “Muchas de las compañías que ya desarrollan plenamente los nuevos productos podrían generar un mayor negocio tanto para CIE Automotive como para Gestamp”, indica García.

Recuperación del sector

El sector de la automoción se encuentra en plena recuperación a nivel global, con una revisión al alza de las previsiones de producción de vehículos. Así, las estimaciones de IHS del mes de junio apuntan a un mercado de 96 millones de vehículos producidos en 2025, lo que supone un 28% más frente a los cerca de 75 millones de 2020. Antes, para 2022, se prevé que la fabricación haya superado los niveles prepandemia, es decir, los 88,9 millones de 2019.

En este contexto, CIE obtuvo un beneficio neto de 78,2 millones en el primer trimestre de este año, cifra que supone un incremento del 7% en comparación con el mismo periodo de 2020, el trimestral más alto de su historia, elevando sus objetivos para el conjunto del año.

Además, recientemente la compañía actualizó sus previsiones estratégicas para el periodo comprendido entre 2021 y 2025, un plan ambicioso con el que pretende cerrar el último año incluido en su hoja de ruta con un beneficio neto de 500 millones de euros y un ebitda de 1.000 millones, y batiendo al mercado a nivel global, con una fuerte generación de caja y controlando el capex y la deuda.

Por su parte, en el Día del Inversor que celebró en junio Gestamp reiteró sus previsiones de resultados para el ejercicio 2021, tras alcanzar los 51 millones de euros de beneficio neto en el primer trimestre de 2021, frente a los 14 millones del primer trimestre de 2020 y los 41 millones del primer trimestre de 2019, cifras con las que sobrepasó los niveles pre-Covid.

Para las dos compañías, explica Aristegui, los resultados del segundo trimestre estarán impactados por la crisis de los semiconductores y por la pandemia; mientras que contarán con vientos de cola como la recuperación económica y los bajos inventarios. “Por la falta de semiconductores, no se han podido fabricar todos los vehículos requeridos en el segundo trimestre del año”, explica.

Escasez de semiconductores

La fabricación de vehículos entre abril y junio de 2021 ha sido muy superior al del mismo periodo de 2020, con crecimientos esperados en el entorno del 50%. Sin embargo, advierte Aristegui, el segundo trimestre respecto al primero ha sido peor, por lo que los resultados, tanto de CIE como los de Gestamp también serán peores.

La escasez de semiconductores hace que se fabriquen menos vehículos, o que se fabriquen sin que cuenten con los que no son cruciales para su funcionamiento, para después, en el momento en que las empresas automovilísticas cuenten con los chips, llamarlos a revisión. Aunque la falta de estos componentes ha afectado de manera diferente a cada compañía, dependiendo de su exposición geográfica, a todas les ha impactado en la medida que se ha reducido la producción.

También a CIE y Gestamp, explica Aristegui, que cifra la crisis de los semiconductores en 2 millones de vehículos a nivel global, lo que supone una reducción del 10% de la producción media del segundo trimestre.